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Seguramente has escuchado alguna vez sobre ella. Una parte del cerebro tiene problemas con algunas proteínas que se vuelven tóxicas, especialmente la alfa-sinucleína.
Muchas de las neuronas, se van acumulando hasta que forman estructuras tóxicas conocidas como Cuerpo de Lewy. Lo que provoca que éstas se degeneren y mueran.
¿Muy científico para ti? tal vez. Aquí te lo explicamos. El Parkinson es la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente en personas mayores de 50 años en el mundo. La primera es el Alzhaimer.
Síntomas
Estos comienzan de manera gradual: movimientos involuntarios e imperceptibles de manos o brazos. De manera habitual se perciben temblores en el cuerpo o extremidades, así como rigidez y disminución del movimiento.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el uno por ciento de las personas por arriba de los 60 años tendrán esta enfermedad. La mayoría de síntomas comienzan desde los 50 años.
Actualmente entre 4.1 y 6 millones de personas la padecen. Se espera que para el año 2030 un aproximado de 12 millones de personas en todo el mundo padecerán esta patología.
Riesgos del Parkinson.
Debido a la dificultad motora, las personas presentan caídas constantes, por lo que pueden lastimarse gravemente. Otro de los riesgos es que al no tener control de su cuerpo, presentan problemas a la hora de tragar alimento.
Manifestaciones:
Varían en cada persona. Estas pueden ser leves y pasar desapercibidos en un inicio: Ansiedad, fatiga, dolor, alteraciones de sueño y gastrointestinales, temblores, lentitud de movimientos, rigidez muscular, pérdida del olfato, rigidez de postura y equilibrio; pérdida de los movimientos automáticos, decremento en expresión facial, problemas del habla, de la visión y la escritura, además de problemas para deglutir.
Lamentablemente, la enfermedad de Parkinson no tiene cura, aunque existen algunos medicamentos que pueden mejorar y evitar por mayor tiempo los síntomas.
Diagnóstico.
Lamentablemente este solo se realiza de manera clínica. No existe un estudio químico o biológico como tal, por lo que es una enfermedad altamente subjetiva. Es por ello que se debe acudir a un especialista para que sepa diferenciar esta enfermedad de otras. Se recomienda acudir con especialistas neurólogos.
Prevención y tratamiento.
Si bien es cierto que no hay cura, la principal función de los tratamientos son disminuir sus síntomas y manifestaciones. Algunos fármacos que ayudan a elevar la dopamina, se hacen necesarios, tales como la levodopa.
En algunas investigaciones se ha demostrado que, el ejercicio aeróbico regular, podría reducir el riesgo de tener la enfermedad de Parkinson.
Es importante que consultes al especialista si tienes dudas sobre estas complicaciones o en su caso, si conoces a alguien con estas manifestaciones, no dudes sugerirle una visita al médico.
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